“Una bala, un muerto”.
Widowmaker va equipada de lo que haga falta para eliminar a sus objetivos, como minas que despiden gas venenoso, un visor que otorga infravisión a su escuadrón y un potente rifle de francotirador que puede disparar en modo automático.
Sobre ella
Widowmaker es la asesina perfecta: paciente y despiadado, que no muestra emoción ni remordimiento. No le afectan las bajas temperaturas.
Trasfondo
Anélie Guillard creció en la casa ancestral de su familia, el palacio Guillard. Durante gran parte de su vida fue conocida como una bailarina de ballet en París. Se casó con Gérard Lacroix, tomando su apellido, un agente de Overwatch que lideraba las operaciones contra la organización terrorista Talon. Después de varios intentos infructuosos de asesinar a Gérard, Talon centró su atención en su mujer, Amélie. Los operativos de Talon la secuestraron y la sometieron a un intenso programa de condicionamiento neural. Doblegaron su voluntad, reprimieron su personalidad y la convirtieron en una agente encubierta. Los efectivos de Overwatch acabaron por encontrarla, aparentemente en buen estado de salud, y Amélie volvió a su vida normal.
Dos semanas más tarde, mató a Gérard mientras este dormía.
Habiendo cumplido su misión, Amélie volvió a Talon, donde completaron el proceso para convertirla en un arma viviente. Recibió un entrenamiento exhaustivo en el arte del subterfugio y su fisiología se alteró para que su corazón latiera de forma mucho más lenta, lo que volvió su piel fría y azulada y redujo su capacidad para sentir emociones humanas. Amélie dejó de existir, siendo reemplazada por “Widowmaker”, la asesina más efectiva de Talon, y sintiendo nada a excepción de la satisfacción de un trabajo bien hecho. Overwatch tan solo sabía que había sido secuestrada una vez más.
Legado
Widowmaker estuvo presente en una operación contra Talon llevaba a cabo por Overwatch, cuando un grupo liderado por Jack Morrison rescató a varios científicos que Talon había tomado como rehenes. Aunque en liberarlos tuvo éxito, Widowmaker pudo eliminar a varios antes de que fuese encarada por la capitana Amari que cubría la retirada de su equipo. Pudo incapacitarla durante unos segundos, quitándole el casco para descubrir su identidad. El shock al reconocerla fue todo lo que necesitó Widowmaker para volver a disparar, alcanzando a Ana a través de su rifle hasta su ojo cibernético.
Viva
Widowmaker fue enviada a King’s Row a asesinar a Tekhartha Mondatta, el líder de los Shambali, mientras pronunciaba un discurso. Dirigiéndose a una posición desde la que tuviese un buen ángulo, reflexionó sobre cómo había tenido miedo a las arañas de niña, comparándose consigo misma: ninguna sentía emoción ni le latía el corazón. En posición, se preparó para disparar pero Tracer se había percatado de su presencia y la distrajo para que no pudiese matar a su objetivo. Las dos se enzarzaron en una persecución y pelea por los tejados, que terminó con una bomba de pulsos fallida de Tracer que las lanzó a las dos por los aires. Mientras caía, Widowmaker apuntó y disparó una bala al centro del acelerador cronal de Tracer que esta esquivó con una traslación… pero la bala no era para ella, era para Mondatta que mató limpiamente antes de que entrase en su limusina. Aunque la ex agente de Overwatch la arrinconó para preguntarle porque la hacía, Widowmaker tan solo se rió, se despidió y se deshizo de Tracer antes de irse en la aeronave de Talon.
Más tarde consideraría que el asesinato de Mondatta habría sido de sus mejores asesinatos.
Día en el museo
Widowmaker junto con Reaper formó parte de una misión para recuperar el guantelete de Doomfist. Sin embargo, Winston y Tracer se interpusieron. La misión se complicó aún más cuando un niño que estaba casualmente allí cogió el guante y lo usó contra ella. Tras quedar desarmada, escapó con Reaper, pero los ex agentes de Overwatch los persiguieron.
Infiltración
Junto con Reaper y Sombra, Widowmaker fue asignada para asesinar a Katya Volskaya, directora ejecutiva de las Indrustrias Volskaya. Sombra pudo desactivar el sistema de seguridad permitiéndoles la entrada. Se colocó en posición para esperar que Katya entrase en su línea de visión y casi consiguió un disparo limpio pero una alarma saltó haciéndola fallar. La base se puso en alerta y Katya escapó a su oficina fortificada. Reaper le ordenó que se quedase vigilando el perímetro mientras él se enfrentaba a un meca y Sombra la perseguía, pero tras esto les informó de que había escapado.
Mascarada
Después de que Reaper liberase a Doomfist de prisión, este se reunió con Widowmaker en un casino de Mónaco, y la felicitó por el asesinato de Mondatta. Sombra le dijo que preguntase por el asesinato de Volskaya, pero Doomfist terminó la conversación para reunirse con Maximilien en una mesa de juego. Mientras discutían, Widowmaker jugaba, ganando bastantes fichas antes de ser interrumpidos por los agentes de Talon enviados por Vialli para asesinar a Doomfist. Lucharon contra ellos, derrotándolos y después fueron a Venecia. Allí Widowmaker, Reaper y Sombra eliminaron a los agentes de Talon leales a Vialli mientras Doomfist se encargaba del propio Vialli.
El diseño de Widowmaker surgió a partir de una clase jugable de Proyecto Titán. En el lanzamiento original de Prometheus, la clase se llamaba longshot y llevaba un rifle francotirador y ametralladora, y tenía habilidades llamadas “grappling hook” y “recon visor”. Aparecería más adelante con un nuevo diseño más similar a Widowmaker y fue destacado en el arte de los héroes de Prometheus. El primer concepto de Widowmaker fue crear un personaje de francotirador a distancia. Fue de los personajes más sencillos de animar en el juego y de los primeros en ser diseñados para Overwatch junto con Tracer y Reaper. Su habilidad mina venenosa al principio generaba una explosión mucho más grande y mortal.