En el parche 7.3, las fuerzas de Azeroth emprenden un peligroso viaje. No solo viajarán hasta el planeta natal de los eredar, Argus, sino que también tendrán la oportunidad de asestar un golpe devastador a la Legión Ardiente con la destrucción de puntos de invasión en otros mundos.
Como introducción a los puntos de invasión, los jugadores recibirán una misión para entrar en ellos y derrotar a las fuerzas demoníacas que albergan. Se podrá acceder a cada punto de invasión sin necesidad de unirse a ninguna cola y, puesto que no se requiere grupo, podrán sumarse más jugadores a la instancia con un breve lapso de diferencia.
Los puntos de invasión tienen dos niveles, que no solo aumentan la dificultad, sino también las recompensas. Así que necesitaréis más ayuda para completar cada nivel.
- Los puntos de invasión de nivel 1 permiten entre 3 y 10 jugadores por instancia. Si bien es verdad que podéis entrar a solas, lo ideal será que reclutéis al menos dos amigos para que se unan a vosotros para completar el escenario.
- En los puntos de invasión o puntos de invasión superiores de nivel dos se requiere que una banda derroque al jefe, pero, como es natural, también reportan mayores recompensas.
Habrá varios puntos de invasión disponibles en el mundo en todo momento, junto con un punto de invasión superior. Los portales que llevan a estos encuentros aparecerán en vuestro mapa del mundo y cada jugador tendrá que hacer clic en el portal en cuestión para acceder (aunque forme parte de un grupo). Cada punto de invasión aparecerá de forma cíclica durante un par de horas y después se esfumará, así que conviene que no perdáis de vista los tiempos que se indican en el mapa. Vuestro grupo se enfrentará además a otros retos, que variarán según el sitio, como tener que lidiar con un frío extremo o con el fuego. Completar estas invasiones os proporcionará piedras de puerta de Argus, que pueden emplearse para conseguir una recompensa semanal.
Puntos de invasión superiores
Los puntos de invasión superiores darán acceso a vuestra banda a uno de los nuevos jefes del mundo y os brindarán la oportunidad de obtener botín de calidad a partir del nivel 930. Si no tenéis una banda a vuestra disposición, siempre os queda el buscador de grupos (I) donde, sin duda, encontraréis héroes que se unan a vosotros. Los jefes solo darán botín una vez por semana.
Jefes de los puntos de invasión
Desde su bastión en Argus, la Legión emplea una gran cantidad de portales para expandirse por el cosmos como si de una plaga se tratase. Ha saqueado y esquilmado infinitos mundos, cuyos habitantes se han visto forzados a elegir entre servir al Titán Oscuro o enfrentarse a una muerte lenta y dolorosa.
Si no se liberan estos mundos, la Cruzada Ardiente consumirá todo lo que toque y reducirá el universo a cenizas.
Matrona Folnuna
La matrona Folnuna destruye los planetas infectándolos con sus engendros. Estas malvadas criaturas se propagan como una plaga por el territorio, corrompiendo y devorando todo lo que se cruza en su camino.
Maestra Alluradel
Todo aquel que osa mirar a la maestra Alluradel cae bajo su siniestro control. A las víctimas de su dominio les ordena que se inflijan macabros tormentos a sí mismas. La única escapatoria que les queda a sus esclavos es la muerte, pero Alluradel no está dispuesta a otorgársela hasta que sus gritos de agonía dejan de divertirla.
Inquisidor Meto
La maestría del inquisidor Meto con la magia vil no tiene apenas rival en el seno de la Legión. Meto utiliza este poder para sembrar el caos y la destrucción por todo el cosmos, dejando infinidad de mundos en llamas a su paso.
Occularus
Occularus se alimenta de las mentes de sus enemigos y saborea su desesperación cuando les abrasa la carne. Esta maligna criatura ha devorado mundos enteros, pero su sed sigue sin saciarse.
Sotanathor
La legendaria fuerza de Sotanathor se forjó en innúmeras campañas que prendieron las llamas de la destrucción por todo el cosmos. Este brutal demonio comanda vastas legiones que nunca han conocido la derrota.
Señor del foso Vilemus
La brutalidad del señor del foso Vilemus tiene fama incluso dentro de la propia Legión. Disfruta envolviendo a sus enemigos en llamas de fuego vil, y riéndose después de su desesperación cuando empiezan a implorar la muerte.
Fuente: BLIZZ
