Durante la celebración de la BlizzCon de este año, un empleado de Blizzard de alto nivel compartió con @PandaTVoce información que ha dejado algunos puntos muy importantes. A pesar de la creciente popularidad de otras plataformas y juegos en línea, World of Warcraft (WoW) sigue reinando en el universo de Blizzard, tanto en términos de ingresos como en números de jugadores.

La primera revelación fue que World of Warcraft sigue siendo el rey indiscutible en términos de ingresos para Blizzard. Aunque la industria de los videojuegos ha experimentado un auge de nuevos títulos y modelos de negocio, WoW ha demostrado ser una fuente constante de ingresos para la empresa. Este hecho subraya la lealtad continua de los jugadores hacia el juego, que ha resistido el paso del tiempo y sigue siendo una fuerza dominante en la industria.

La segunda revelación es que la versión "Retail" de World of Warcraft sigue siendo la favorita en términos de números de jugadores. Este dato podría resultar sorprendente para aquellos que han seguido la creciente popularidad de la versión "Classic" del juego. La explicación dada es que vivimos en una era dominada por plataformas como Twitch, donde la popularidad de un juego puede eclipsar la realidad de su base de jugadores.

La realidad es que World of Warcraft no es un juego que dependa de Twitch para mantenerse relevante. Aunque la comunidad de Twitch ha contribuido significativamente a la visibilidad de muchos juegos, WoW ha demostrado tener una base de jugadores sólida y comprometida que no se ve afectada por las tendencias de streaming. La versión "Retail" sigue siendo la preferida por la mayoría de los jugadores, muchos de los cuales pueden no estar familiarizados con Twitch o simplemente no consideran necesario seguir las transmisiones en vivo. Aunque Classic ha tenido una visibilidad muy importante en Twitch, no está ni de lejos cerca de los números de Retail.

World of Warcraft, con sus diversas expansiones y contenido actualizado, sigue siendo el corazón y el alma de Blizzard, manteniendo su posición como el título más influyente y rentable de la empresa.