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Hols
23 de abril de 2021
Blizzard, Clásicos Blizzard, Overwatch“¡Eh, chicos! ¡Llega la caballería!”.
Armada con dos pistolas de pulsos, bombas energéticas de tiempo y un humor rápido como el viento, Tracer es capaz de «trasladarse» instantáneamente de un sitio a otro y retroceder en su línea temporal mientras combate el mal por todo el mundo.
Pistolas de pulsos: Tracer dispara sus dos pistolas a una velocidad espectacular.
Traslación: Tracer altera el espacio en horizontal para desplazarse unos metros en la dirección en la que se está moviendo. Puede almacenar hasta tres cargas de Traslación, que se van regenerando en cuestión de segundos.
Regresión: Tracer viaja atrás en el tiempo, lo que restaura su salud, su munición y su posición en el mapa al estado en el que se encontraban unos segundos antes.
Bomba de pulsos: Tracer lanza una gran bomba que se adhiere a cualquier superficie o enemigo desafortunado con el que entra en contacto. Tras unos segundos, la bomba explota e inflige gran daño a todos los enemigos en su radio de explosión.
Entrega especial: En una sola partida rápida o competitiva, pega 4 bombas de pulsos de Tracer en enemigos. Recompensa: grafiti “mona”.
Regresión total: Recupera 400 de salud con Regresión de Tracer sin morir (partida rápida o competitiva). Recompensa: grafiti “píxel”.
La ex agente de Overwatch conocida como Tracer es una aventurera que salta en el tiempo y una fuerza irrefrenable para el bien. Nació en Londres pero ha viajado por todo el mundo. Era una gran admiradora de Tekharta Mondatta y Mei fue una inspiración para ella. Considera que a veces hay que hacer lo correcto, incluso si está fuera de la ley. Es una fanática de la música pop/punk británica, como The Clash o The Beatles, y colecciona discos de vinilo.
Lena Oxton creció en Londres. Su padre era un soldado, y ya en su décimo cumpleaños comenzó su afición coleccionista de discos de vinilo comprando uno por sesenta libras. En su adolescencia le encantaba ir de fiesta, pasar la noche fuera y asistir a conciertos de rock. Al cumplir los diecisiete años, consiguió su primera motocicleta. Amante de la velocidad, se unió a la Royal Air Force como piloto de pruebas, y allí recibió el nombre en clave “Tracer”, haciéndose conocida por sus habilidades y su valiente pilotaje, así como su actitud siempre positiva.
Mientras aún era miembro de la Royal Air Force, Lena se convirtió en la persona más joven en ingresar al programa de vuelo experimental de Overwatch. Fue elegida a dedo para probar un nuevo prototipo de nave que podía teletransportarse, el Slipstream. Sin embargo durante su primer vuelo, la matriz de teletransportación de la aeronave falló y desapareció. Pasaron semanas, y sin rastro de Lena, se creyó que el Slipstream había sido destruido por mal funcionamiento y su piloto había muerto.
Para sorpresa de todos, Lena reapareció meses después, pero algo había cambiado: sus moléculas se habían desincronizado del flujo del tiempo. Sufriendo una novedosa enfermedad que llamaron “disociación crónica”, era una especie de fantasma viviente, que a veces desaparecía durante horas y días. Incluso cuando estaba presente no era capaz de mantener una forma física. A veces tenía sueños extraños sobre el pasado, como ser empleada de cocina en una casa de campo.
Los médicos y científicos de Overwatch estaban perplejos, y parecía que no era posible ayudarla hasta que el científico Winston diseñó un acelerador cronal, un dispositivo capaz de mantener a Tracer anclada en el presente. Además le dio a Tracer la capacidad de controlar su propio tiempo, permitiéndole acelerarlo y ralentizarlo a voluntad. Los efectos del accidente también le dieron a Tracer propiedad de envejecimiento únicas.
Siete años antes de la actualidad, después del incidente con el Slipstream, Tracer se sometió a un entrenamiento para convertirse en agente de Overwatch y se entrenó bajo la supervisión de Winston y la doctora Ziegler. En las instalaciones de evaluación y entrenamiento en la sede de Overwatch, se enfrentó al agente de Blackwatch Genji. La doctora comentó que si todo iba bien podría unirse pronto al servicio activo, con lo que Winston estaba de acuerdo. El día 27 del levantamiento en King’s row, Jack Morrison ya estaba impresionado por las habilidades de Lena, y al convocarla a la oficina y ver las imágenes de Londres, Lena le confesó su fe en la misión de Overwatch.
Considerando que estaba preparada, Jack Morrison envió a Tracer, Mercy, Torbjörn y Winston a una misión para poner fin al conflicto en Londres. Fue subiendo a la nave recibiendo palabras de aliento de sus nuevos compañeros donde Tracer adoptó la frase “llega la caballería” que comentó Torbjörn al verla. El equipo se abrió paso por las calles neutralizando a las unidades de Null Sector, consiguiendo finalmente derrotar a los ómnicos y rescatar a los rehenes.
Con sus nuevas habilidades, Tracer se convirtió en uno de los agentes más efectivos de Overwatch. En algún momento estuvo destinada a Observatorio: Gibraltar y celebró junto con otros agentes el cumpleaños del comandante Morrison.
Bajo el mando de Sojourn, Tracer dirigió un equipo de Overwatch formado por Mercy, Winston, Genji y ella misma en una operación en la Habana. Su objetivo era captura a Maximilien, contable de Doomfist y aliado de Talon. Las fuerzas de Talon se movían por la ciudad en convoy, uno que Tracer atacó desplazándose a toda velocidad en aerodeslizador, enfrentándose a los soldados de Talon. Junto con sus compañeros, consiguieron destruir el convoy, pero su objetivo huyó a pie a través de la destilería Don Rumbótico hasta el fuerte del Mar de la Habana. Allí lo detuvieron antes de que escapase, y por salvar su pellejo Maximilien estuvo dispuesto a decirles donde encontrar a Doomfist: estaría en Singapur en tres semanas, y confiaba en que Overwatch no le dijese a su jefe sobre su pequeña traición.
Junto con Winston y Genji, Tracer luchó contra Doomfist en Singapur. Su agilidad y velocidad no podían ser igualadas por Doomfist, aunque sus pistolas de pulsos eran poco efectivas contra él. Fue tomada por sorpresa cuando el líder de Talon vio su patrón y agarró su acelerador cronal en el aire aplastándolo con su puño haciendo que Tracer parpadease hasta desaparecer. Winston enfureció y derrotó a Doomfist en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
El acelerador cronal de Tracer fue reparado o reemplazado tiempo después, con ella a salvo.
Después de la disolución de Overwatch, Tracer sintió que había perdido el rumbo. Volvió a la Royal Air Force pero al enterarse de que la querían como oficinista en el mejor de los casos, se marchó. Comenzó una nueva vida en Londres con su novia, Emily, que residía en un apartamento en Willington Road. Al darse cuenta de que necesitaba moverse, se convirtió en una justiciera dentro de la ciudad, ayudando donde pudiese. Emily llamaba a sus actividades de justiciera “heroicidades compensatorias”.
En aquella época, Tracer era feliz pero sentía que le faltaba algo, que necesitaba a Overwatch aunque fuese imposible. Tras comprar un álbum en Empire Records como solía, vio a un policía persiguiendo a una banda de ómnicos. Consiguió arrinconar a una de ellos y vio que había robado un modulador que necesitaba para la red de los Bajos Fondos (donde vivían los ómnicos de Londres) ya que nadie quería venderle uno legítimamente. El amor que compartían por la música hizo que se presentasen e Iggy, la ómnica, le ofreciese a Tracer ver su colección, conociendo además los Bajos Fondos y a las compañeras de Iggy, Lady y Lizzy.
Iggy acompañó a Tracer fuera de los Bajos Fondos, y esta se ofreció a ayudarle con lo que pudiera para reparar la red, pero al despedirse fue asaltada por una banda de ómnicos. El líder de la pandilla que derrotó sin esfuerzo, le advirtió que se mantuviese al margen, que no querían la ayuda de un humano.
Tracer no les hizo caso y regresó al poco con una nueva pieza para la red. Vio que Iggy estaba siendo regañada por Kace, justamente el líder de la pandilla que la había atacado. Teniendo problemas para conseguir algunas piezas, recibió un paquete del señor “Monoes Pacial”, una pieza más para la red que Winston le enviaba.
Mientras buscaban un transformador para la red, Iggy le dijo a Tracer que Tekharta Mondatta la buscaba. Reuniéndose con él, se reconocieron de Rebelión siete años atrás. Mondatta calmó la conciencia de Tracer sobre si ella era la “adecuada” para ayudar a los ómnicos, diciéndole que todos debían ayudarse mutuamente para un futuro juntos como iguales. Para algunos, la Crisis Ómnica nunca había terminado, pero que debían actuar en lugar de quedarse de brazos cruzados.
Había llegado la hora del discurso de Mondatta, y tras despedirse de ella, Tracer se unió a la multitud de fuera donde también estaba Iggy. Pero conforme el monje ómnico empezó a hablar tuvo un mal presentimiento y se movió entre la multitud buscando el problema.
El instinto de Tracer no le falló, ya que se enfrentó a Widowmaker en los tejados. Sin embargo a pesar de todos sus esfuerzos, la agente de Talon asesinó a Mondatta, y tras incapacitar a Tracer se marchó. Lena había sobrevivido, pero su acelerador cronal estaba dañado.
Si no fuese suficiente, además Iggy pensaba que Tracer había dejado morir a propósito a Mondatta.
Tracer se culpaba de no haber podido salvarlo, y aquello era tan grave que podría marcar el inicio de una nueva guerra. Regresó a su apartamento y allí Emily le dijo que no había sido culpa suya.
Días después, Tracer recibió otro paquete de Winston, una pieza para su acelerador cronal. Aunque no tuvo tiempo de arreglarlo. Para controlar una manifestación pacífica ómnica el gobierno había enviado a los cuerpos especiales, usando tecnología sónica que a corta distancia podía ser mortal. No pudo hacer nada para evitar que matasen a Lady con un pulso sónico, y tan solo pudo ayudar a llevarla de regreso a los Bajos Fondos donde le hicieron un pequeño funeral. Kace aprovechó para increpar a Tracer, diciéndole que era una agente de Overwatch y que estos nunca los habían ayudado. No era bienvenida allí.
Al volver a la superficie, el acelerador de Tracer empezó a fallar, aunque por suerte Lizzy la encontró y la ayudó a volver a su apartamento. Ella y Emily pudieron arreglar su acelerador con las piezas de Winston.
Al revisar las piezas, Lizzy encontró un dispositivo que creía que podía reparar la red, aunque dudaba que Kace le permitiese acercarse, ya que había hecho que todos los ómnicos del Inframundo se pusiese de su lado. Fue entonces cuando Tracer recibió la llamada de Winston a todos los agentes. Tras una breve conversación donde se contaron mutuamente lo que sucedía tuvo que colgar, puesto que de nuevo pasaba algo.
Mientras todo esto sucedía, Kace había montado un espectáculo: mientras lanzaba un discurso para animar a todos los ómnicos de los Bajos Fondos a alzarse, hizo que uno de sus hombres le disparase pero que fallara, para sembrar el pánico y hacerse ver como un líder como Mondatta. Iggy se había dado cuenta y se encaró a él, terminando atrapada. La revolución ómnica había empezado, y no podía hacer nada para evitarlo.
Tracer consiguió rescatar a Iggy de Kace, y ellas dos junto con Lizzy salieron corriendo para toparse con un grupo de ómnicos que no estaban del lado de Kace. Recorrieron los túneles de los Bajos Fondos buscando a todos los ómnicos que no querían una revolución para ayudarles a escapar a la superficie pero los detuvieron los seguidores de Kace. Consideraban que esos ómnicos pacíficos eran traidores. Tracer los entretuvo para darles tiempo a huir, pero su acelerador cronal estaba en las últimas. En el instante preciso, apareció Winston para ayudarla, que había acudido lo antes posible tras su conversación.
El plan de Kace era atraer a todos los humanos posibles a los Bajos Fondos (las autoridades habían sido alertadas por la actividad ómnica) y detonar la red cuando estuviesen dentro. No parecía que pudiesen hacer mucho pero a Iggy se le ocurrió una idea. Se ganó el corazón de los ómnicos que seguían a Kace con un mensaje: ómnicos y humanos son uno, la revolución era dejar atrás el pasado y construir juntos un futuro mejor; debían luchar por los ómnicos, no contra los humanos. Kace, desesperado al ver que sus secuaces soltaban las armas, disparó a Iggy pero Tracer se puso en medio. Con su acelerador dañado la bala le perforó un pulmón y se sometió a una operación que duró ocho horas. Una semana después estaba como nueva, su acelerador estaba reparado y aunque Kace había escapado la paz había vuelto.
Widowmaker y Reaper atacaron un museo dedicado a Overwatch con el objetivo de recuperar el guantelete de Doomfist que allí se encontraba expuesto. Tracer y Winston lucharon contra ellos obligándoles a retirarse. Lena felicitó a dos niños que se encontraban allí por casualidad y los habían ayudado, diciéndoles que el mundo siempre necesitaba nuevos héroes. Dejó el guantelete casi roto por su uso en su sitio y siguió a Winston persiguiendo a los agentes de Talon.
Durante las vacaciones de invierno, Tracer buscó un buen regalo de Navidad para su novia Emily, en King’s Row. Después de pasar por varias tiendas sin éxito estando ya la mayoría estaban cerradas, creyó encontrar un buen regalo: una bufanda que finalmente cedió a otra persona. Ya pensando que no encontraría un regalo, una niña le dio un presenta en agradecimiento por haber recuperado los regalos de su familia de un ladrón esa misma noche. Al llegar a casa le dio ese regalo a Emily, que para su sorpresa era la bufanda que había querido comprar antes, que le encantó. Más tarde fueron juntas a cenar con Winston en Observatorio: Gibraltar para celebrar la Navidad.
Tracer surgió a partir de la clase jugable de Proyecto Titan llamada Jumper. Llevaba pistolas automáticas y bombas de tiempo, ya con habilidades llamadas “blink” y “recall”. La mayor parte del trabajo conceptual del jumper era masculino, y eso cambió en el juego que se convertiría en Overwatch. Convirtieron al jumper en un personaje femenino y le dieron un transfondo.
Tracer comenzó conceptualmente con la idea de un héroe que se trasladaba a través del mapa. Fue la primera heroína desarrollada para el juego, y aunque no fue creada para ser protagonista, el equipo se entusiasmó mucho con ella. Chris Metzen la comparó una vez con Spider-Man. Después de que se le diese un nombre y una historia, el equipo tuvo una clara dirección creativa: convertir clases en héroes.
Actualmente Tracer es el “personaje mascota” de Overwatch y su héroe central. Jeff Kaplan declaró que la decisión de anunciar a Tracer como lesbiana en el cómic navideño fue consideraba cuidadosamente por el equipo de Blizzard. Querían retratar la sexualidad de Tracer de una manera realista y no una complaciente, respetuosa con el personaje y vinculada a su historia, no marcar con un tick una casilla en la lista. Sabían que el anuncio iba a recibir una reacción negativa por la popularidad global de Overwatch y que en algunos países tendrían problemas. Rusia de hecho prohibió que el cómic apareciese en el sitio web ruso de Overwatch por sus leyes.
Junto con Winston, Bastion y Torbjörn, Tracer vio un anuncio de Blizzard World, declarando que no podía esperar a montar en alguna atracción.
Es el primer personaje confirmado como LGTBI+, concretamente, es lesbiana.
El equipo favorito de Tracer es Chelsea.
El 15 de septiembre de 2020, para celebrar la salida del primero de cinco cómics de Tracer-London Calling, se lanzaba el desafío “Cómic” de Tracer donde por ganar nueve partidas en el juego podías conseguir, un grafiti, un icono y una apariencia épica con efectos de sonido únicos. También por visualizar directos en Twitch se podían conseguir un total de seis grafitis exclusivos.
Hols23 de abril de 2021Blizzard, Clásicos Blizzard, Overwatch
